Ayer tuve un domingo muy pre-lunes. De estos días tontos en los que apetece hacer poco o nada más allá de acurrucarte en el sofá y mirar la tele como quien mira al infinito. Y mira que mis planes eran bien distintos, pero mis ganas no estaban muy por la labor de cumplir con mi lista de tareas pendientes.
Aún así me cundió para algunas cosas, como que el señor Wayne me convenciera de que le acompañara (casi a regañadientes) a darle un lavado interior y exterior a mi coche, que buena falta le hacía, la verdad. Me sirvió para descubrirle arañazos y algún que otro roce antes camuflados (no sé yo qué es peor), pero lo cierto es que ahora brilla casi tanto que cuando lo compré. Creo que ya va siendo hora de que le acoplen a los coches el mecanismo ese que hace que los hornos modernos se limpien solos. Es sólo una idea…
Un almuerzo-merienda, un descanso de cinco minutos, convertido en siesta de una hora, y varios cientos de whatsapps de los de arreglar el mundo después, hice acto de presencia en el estudio para preparar el post de hoy, pero resulta que mis musas también estaban de pre-lunes y me dijeron que me las apañara yo solita, que ellas, al séptimo día, descansaban.
Lo intenté, os lo prometo. Surqué los mares de Internet en busca de inspiración, carpeta de Pinterest arriba y abajo, anécdotas divertidas, cosas curiosas y lo más que llegué a hacer fue garabatear, anotar, tachar y emborronar algún papelote destinado a convertirse en pelota de las de colar en la papelera cual canasta (aunque yo siempre fallo).
Pero a veces las cosas funcionan así y no nos queda más que aceptarlo y reírnos de la situación. Siempre habrá «días de esos», ya sean domingos, lunes o sábados. Podría haber agachado la cabeza y aparecido por alguna red social contándoos que por alguna razón, más bonita que la falta de ideas, esta semana el lunes se quedaba sin post. Pero mejor adaptaré la letra de aquella canción y diré que «este es mi blog y lloro si quiero», que a todos nos ataca el malvado folio en blanco y que nunca viene mal hablar de ello.
Eso sí, me despido haciendo firme propósito de enmienda y prometo (con la boquita pequeña) confeccionarme una amplia lista de ideas para entradas futuras, que estoy del toro este que me persigue desde principios de año hasta el moño. Agradeceré de todo corazón toda palabra de apoyo, comentario divertido o desvarío, similar a este que yo os he soltado, que queráis dejarme aquí abajo, porque, reconocédmelo, no estoy sola, ¿verdad?
Y ahora sí me despido. ¡Feliz lunes! (aunque, sintiéndolo mucho, esto también va con boquita pequeña).
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Hola chica sin ideas, jajaja. Me río porque puedo ver que aun sin que vengan las musas (eso crees tú), sacas una ilustración estupenda acompañado de un texto que nos hace a todas/os pensar y comentar.
Hasta de los días dónde no encuentras la inspiración sacas algo, jajaja.
Besotes,
lili
Pues debieron ser las musas que andaban de guardia las que me visitaron para ayudarme a escribir unos cuantos párrafos acerca de lo frustrante que resulta no estar inspirada. Pero mira, si da que pensar y comentar, más contenta no puedo estar.
Un besote.
Uf, días de esos tenemos tod@s hija! Yo a veces saco la cámara buscando cosas curiosas o llamativas para fotografiar, y lo único que hago es pasearla, porque nada me llama la atención…es un rollo y un poco frustrante, pero en un par de días se pasa y vuelven las musas :P
Pero de todo puede hacerse lectura positiva. Cuando nos invade este bloqueo y nos frustramos es porque la mayor parte del tiempo somos capaces de inventar cosas creativas, de captar imágenes únicas y nos acostumbramos a esa adrenalina que nos regala el estar siempre inventando. Pero para apreciar esos momentos como se merecen, tenemos que aceptar también los días de hoja en blanco e inspiración cero. ¿A que tengo razón? :)
Un besote.
Aquí estoy y estaré! Así que no te preocupes! A veces estas cosas pasan; a mí se pasa también de vez en cuando, los folios en blanco y las épocas un poco raras. Incluso cundo más cosas quiero hacer, me blogqueo. Cuando me pasa, me pongo a hacer algo diferente para desconectar, aunque sea leer una revista, hasta que de buenas a primeras llega la musa ;P
Que pases una feliz semana! Un abrazo
Mira que son caprichosas las dichosas musas, a veces no tienen corazón. Entre que se largan sin mediar palabra y que una no anda muy bien de tiempo, al final pasan cosas como ésta. Pero alegra saber que nos pasa a todos, por eso creo que a veces viene bien hablar de ello.
Muchas gracias por estar ahí, guapa, y por dejarme estas palabritas tan reconfortantes :)
Un besote enorme.
Yo esos días los tengo siempre. No te preocupes que yo seguiré leyendo tu blog siempre.
Eres muy simpática.
¡Muchas gracias! ¿Ves? Ya la sonrisa de «medio lao» se va convirtiendo en una de verdad.
Un besote y feliz semana.
Yo siempre estoy en otro día: ayer de pre-lunes y hoy de post-domingo… u_u’
¡Que la fuerza te acompañe! :P
Jajaja… Ya queda un poco menos para el pre-viernes, así que sólo espero que esta semana la cosa sea amena y la fuerza nos acompañe a las dos ;)
¡No estás sola, no! Muy a favor yo también de los coches pirolíticos jajaja
Para no estar inspirada el post de hoy se lee genial y habla de algo que nos pasa a todos así que… ¡a seguir!
¡Un besote y buena semana Esther!
¡Gracias, Bea! :) A veces no hay nada mejor que hablar de esas cosas que nos pasan a todos más veces de las que queremos aparentar. Somos humanos y la vida 2.0 también tiene sus crisis.
Lo de los coches pirolíticos (a mi no me dio por buscar el palabro) debe ser algo que ya se esté estudiando, ¿verdad? Porque de verdad que vaya lata, jejeje.
Un besote y feliz semana también para vosotros.
Siempre tenemos esos días, incluso con un montón de ideas en la cabeza, te encuentras con un montón de proyectos empezados pero sin poder hablar de ellos hasta no tenerlos más avanzados y de mientras, me siento delante del ordenador a preparar mi entrada y me preguno, y ahora, ¿Qué?
En fin, muchos ánimos, y solo decirte que igualmente me gustan estas entradas porque me hacen ver que no sólo me pasa a mí! (en plan un poquito egoista, pero no mucho, eh!!) ;-)
Saludos!
No es egoísmo, sino identificación, creo yo, así que no te preocupes. Yo creo que también es necesario hablar de estas cosas, porque solemos saltar de blog en blog idealizando el día a día de gente a quien realmente no conocemos y que parecen no tener lunes que de verdad sean lunes ni días grises. Todos nos bloqueamos, pero para mí es un buen ejercicio soltarlo y mira tú, hacer un post de ello.
Un besote y mil gracias por tu comentario.