Yo no sé si los treinta son los nuevos veinte, o eso no es más que una patraña para aliviar la crisis que algunos dicen sufrir a estas edades, pero lo que sí sé es que a mí me están regalando ganas infinitas de aprender mil cosas nuevas, y bien agradecida que les estoy. Supongo que durante mis veinte anduve yo muy ocupada tratando de apurar la vida, como si ésta tuviese previsto escaparse antes de acabar la década, pero no. Llegaron los treinta y éstos me enseñaron a disfrutar de todo con más calma, sin prisa, pero también sin pausa, y con espíritu multidisciplinar.
Nada se parece en nada a lo que durante mucho tiempo imaginé que sería mi vida a esta edad (algún dibujo hay por ahí que da cuenta de ello), pero no me importa, porque gracias a la libertad que por aquella época nunca le atribuí a mi yo futuro (y ahora presente), sé que lo mejor está aún por llegar y me encanta la sensación de descubrir que las ganas de aprender nunca se acaban.
Pero igual me estoy poniendo un poco profunda, y es que yo venía a contaros que con eso de que dentro de dos días es mi cumpleaños (caen treinta y dos, casi nada…), ya voy recibiendo algunos regalitos, y mi señor Wayne, que es el mejor novio del mundo mundial, ha atendido a mis súplicas y me ha regalado una preciosísima máquina de coser (que ya incluí hace un tiempo en mi wishlist). Es tan bonita que ya le he jurado amor eterno, aunque de momento sea puramente platónico, porque no tengo ni la más remota idea de cómo funciona, y a lo más que ha llegado hoy nuestra relación ha sido a conectar el cable y ver que responde a la electricidad. Buen comienzo.
Ya estoy trazando mi plan de aprendizaje, que incluye darle mucho la brasa a mi madre y a mi suegra, para que me iluminen con su sabiduría, y surcar los mares de internet en busca de mil patrones y tutoriales varios. Y no os apuréis, que como sé que os picará la curiosidad y querréis saber cómo se va desarrollando mi avance con la técnica (¿verdad que sí?…), iré dando buena cuenta de ello por estos lares. Sobra decir que acepto consejos, trucos e ideas relacionadas con el mundo del costureo, y es que ¿qué hay más bonito en el mundo que compartir?
Nada más por hoy. Os espero el viernes (y no me faltéis, que es mi cumpleaños y eso no estaría bonito :P).
¡Que paséis un gran día!