Freebies: etiquetas amigos invisibles

clásicos-navideños-amigo-invisible#PlayItLoud!

¡Vuelve la Navidad al blog! Y hoy os traigo la cuarta entrega de descargables festivos (al final de la entrada os hago recuento para que no tengáis que ir buscando de post en post en caso de que os apetezca hacer buen uso de ellos, ¡bien feliz que me haréis!).

En esta ocasión la temática está relacionada con uno de los grandes clásicos navideños: el Amigo Invisible. Y es que, sin duda, esta práctica es cada vez más frecuente en fechas como éstas. Entre compañeros de trabajo, familiares, amigos de los de siempre e incluso virtuales. Y dado que el packaging está cada vez más de moda, he diseñado unas etiquetas bien simpáticas para acompañar a ese regalo especial y secreto y que vuestro detallito sea todo un éxito (¡o que al menos resulte más aparente!)

etiquetas-amigo-invisible-chico-chica

Por una parte tenemos las etiquetas los amigos invisibles propiamente dichos, camuflados bajo sus antifaces mágicos, que consiguen ocultar la identidad de los «sujetos regaladores». Podéis elegir entre el chico y la chica, que sé que algunos hombrecitos os asomáis por aquí, aunque no seáis muy dados a comentar (animaos, chicos, que es gratis).

etiquetas-amigo-invisible-varios

Y también os dejo éstas de aquí arriba, que pueden usarse para el amigo invisible o para cualquier otro presente navideño que tengáis pensado hacer estas fiestas. Para los más fiesteros o musicales la botella de anís, la caja de regalo para los más clásicos y el reno feliz para los más guasones (qué me habrá dado este año a mí con los renos…).

¿Que cómo podéis descargarlas? Pues es tan fácil como hacer click aquí y guardarlas en vuestro ordenador para imprimirlas tantas veces como queráis. Os dejo, además, los links a las entradas en las que podéis encontrar los freebies navideños que he publicado hasta la fecha:

Espero que las disfrutéis y si las usáis, como ya os he dicho alguna vez, me encantará que me enseñéis alguna fotito. También ofrezco amor eterno a cambio de que compartáis en vuestras redes sociales, para que llegue a cuanta más gente mejor, y si ya me dejáis un comentario, la jugada será completa (va, que tampoco pido tanto).

Y hasta aquí por hoy. Nos vemos el viernes con más y mejor.

¡Que paséis un gran día!

fin post-

Anuncio publicitario

Encuadernación pro en casa

encuadernación bind it all 1#PlayItLoud!

Que los flechazos materiales existen es algo que todo sabemos. De hecho, pese a que pueda sonar frío y superficial, son mucho más abundantes que los flechazos entre personas, y el lado bueno es que puedes sufrir mil al día sin la sensación de estar traicionando al anterior. Yo no he calculado mi promedio de flechazos diarios, pero me temo que si lo hago, la cifra sería bastante elevada. Pues bien, el año pasado me encandilé de esta encuadernadora cuando la vi en el blog de Nini, Bonituras de corta y pega, y fue un amor a primera vista de los fuertes, de esos que te hacen decir «la quiero y tiene que ser mía». Poco después tuve la oportunidad de hacerle una visita a su dueña en aquella escapada al DIY Show de la que ya os hablé, y supe que era amor verdadero cuando la tuve en mis manos.

La preciosa encuadernadora Bind it All en rosa pastel se fue directa a la primera posición de mi wish list y fue mía cuando mi fantástico señor Wayne me la regaló en nuestro aniversario (¡hurra!). He tardado bastante en usarla, pero como toda buena cosa que se hace esperar, ha merecido mucho la pena.

encuadernación bind it all 2

Lo primero que hice fue diseñar la imagen de las tapas. En esta ocasión decidí dibujar una frase divertida que me inspirara en mi misión craft, así que me fui de cabeza a por ese «I’m Crafty and I know it», que para mí tiene un significado muy especial.
encuadernación bind it all 3

Hacer los agujeros no es del todo difícil, pero hay que ser bastante cuidadoso y poner en práctica un par de truquitos necesarios para alinearlos, lo cual será fundamental a la hora de completar la encuadernación. Se requiere un poquitín de paciencia y ganas de disfrutar de lo hecho a mano.

encuadernación bind it all 7

Et voilà. Este es el resultado del proceso. Estoy tan contenta y orgullosa que no puedo dejar de mirarla, ni esperar a llenarla de ideas bonitas. ¡Ay, si yo hubiese tenido esto en mi poder en mis años de estudiante! Habría sido la envidia de la clase y me habría ahorrado una buena pasta en la papelería del pueblo.

encuadernación bind it all 5

encuadernación bind it all 4

encuadernación bind it all 6

¿Qué os ha parecido? ¿No es para enamorarse en bucle? Yo, a estas alturas, ya estoy perdida y no puedo más que reconocer que el mundo del craft me ha convertido en una ‘Material Girl’ (#PlayItLoud!), pero es que, cuando además te conviertes en la creadora del objeto, sienta tan bien…

¡Hasta el viernes!

fin post-

¡Tela marinera! Decora tus propias zapatillas

#PlayItLoud!

Llevaba ya un montón de tiempo con el gusanillo de tunearme alguna prenda. Unos vaqueros, una camiseta, una tote bag o unos zapatos, por qué no. La semana pasada, en una de mis visitas esporádicas, pero fructuosas al Lidl, me topé con unas zapatillas blancas la mar de baratitas (creo recordar que alrededor de los seis o siete euros) y los ojos me hicieron chiribitas. Objetivo a la vista. Saliese bien o mal, mi intrusión en el mundo textil estaba a punto de comenzar.

Zapatillas print anclas DIY

Para esta primera vez, he utilizado una tinta azul permanente para múltiples superficies de The Yellow Owl Workshop que tenía en casa, y he tirado de maña y pulso para fabricar mi propia sellito. Últimamente tengo un poco de fijación mental con las anclas, así que este fue el motivo que elegí para mi gran aventura. Como quería que fuese pequeñito, me costó lo suyo dar con el definitivo (la vencida fue a la tercera), pero al final lo conseguí. El dibujo se veía nítido y sin bocados en las líneas, como me ocurrió con los primeros.

Zapatillas print anclas proceso

Y una vez preparados todos los materiales, a estampar. Empecé con mucho miedo, mojando el sello cinco veces antes de cada aplicación y esperando varios segundos antes de levantarlo del zapato, pero una vez te pones, acabas estampando cual notario, poseída y, en mi caso, con una cierta enajenación asimétrica transitoria. Pero mira, al menos conseguí no emborronarlos y si no te fijas demasiado, eres incapaz de percibir que, en cada zapatilla, el número de anclas por fila y su orientación van por libre.

Zapatillas print anclas DIY 2

 

Zapatillas print anclas DIY resultado 2

Zapatillas print anclas DIY final

Misión cumplida. Soy consciente de que puede que el señor Amancio no me llame de urgencia para pedirme que trabaje en su departamento de diseño, pero a mi fondo de armario zapatil le va a venir de perlas contar con este par de marineras para el periodo de entretiempo. Yo me lo he pasado bien y hasta me gusta el resultado. Primera, que no última. Habrá que seguir probando.

¡Feliz lunes!

fin post-